LENGUA CASTELLANA
"La lectura hace al hombre completo; la conversación lo hace ágil, el escribir lo hace preciso". Francis Bacon, escritor y filósofo. En el Instituto Técnico, Académico y Scout José Martí, el área de Lengua Castellana permite potenciar el desarrollo de Competencias Comunicativas que propicien procesos de aprendizaje significativos, a través de la interacción y la interdisciplinariedad, fomentando la investigación y la comprensión para que el individuo piense y actúe de manera creativa; transformando su entorno, vivenciando principios y valores a ejemplo de Jesús de Nazareth, José Martí y Baden Powell. Con ello, se da respuesta a los intereses personales y modelos de vida, con un entorno de trabajo dirigido hacia el respeto del otro; se trata de un trabajo investigativo, interactivo y colaborativo para el desarrollo de las competencias, sin restringir la autonomía de los participantes en el proceso educativo; desarrollando capacidades intelectuales y actitudinales en las dimensiones cultural, tecnológica, reflexiva, ética y crítica, “Formando Excelentes Líderes”. En este sentido, el lenguaje en la educación básica, media básica y media se orienta hacia un trabajo de aprendizaje y uso de diversas formas de comprensión y producción de textos, como un proceso de formación intelectual y cultural. Allí, se reconoce al educando como un sujeto con procesos afectivos, cognitivos y sociales, con un papel protagónico en la experiencia del conocer el mundo a través de las operaciones propuestas por Louis Raths (operaciones del pensamiento: codificar, comparar, clasificar, observar e informar, interpretar, análisis de supuestos, resolución de problemas, criticar y evaluar, imaginar y crear) que son fundamento en el modelo de lector competente; MLO. En conclusión, el área de Lengua Castellana del Instituto Técnico Scout José Martí, busca a través de la motivación del estudiante, fortalecer los procesos cognitivos para aprehender competencias que lo ayuden a resolver problemas de su contexto y proyecto de vida. Todo ello se traduce en una gran participación dentro y fuera de la clase, lecturas constantes, seguimiento de las guías dadas por su maestro, gran observación de su entorno y postura crítica y ética frente a lo que se le enseña en clase y lo que encuentra en su entorno, y la manifestación respetuosa de sus conocimientos y habilidades.